Bueno, como decía, pensé que no habría problema en llegar un poquito tarde a la oficina como siempre, así que ví mi telenovela, me bañé, me arreglé, desayuné y le puse gas al coche. Todo con calma y llegué como a las once de la mañana, que puede sonar muy cínico pero ya sabía que ese día saldría tarde porque no me toca ir al ITAM, así que no me sentía mal respecto de mí mismo. Lo que me hizo sentir mal es que mi jefa me estaba buscando como loca y me llamó al celular y tal y todo el malviaje nomás era para contarme que fue al concierto de Sarah Brightman.
Yo nunca he pensado mucho en ella, sólo sé que fue Christine en el Fantasma de la Ópera y yo cuando era chavito quería ser Christine porque todos los demás personajes me resultaban unos pelmazos, pero después decidí que quería ser Eponine de los Miserables porque el trágico romántico en mí pensaba que sería una buena venganza para el tipo que te rechazó por otra morir en sus brazos después de hacerle un favor.
Bueno, volviendo a Sarah Brightman… pues no fui al concierto y no me pudo importar menos…. Hasta que ví fotos del chou y ahora digo: por qué? POR QUÉ no fuiiiiiii:
This is insane.
Es absurdo en sus niveles más espectaculares. Un corset que está en erupción con ondas? Una corona? Tacones y plataforma? Medias de lazos? Es como Moulin Rouge conoce a las hadas del Sueño de una noche de Verano.
Y si se preguntan por qué Sarah necesitaba tanta falda, la respuesta es un tanto obvia:
Para un máximo balanceo, claro está!!!
Oh my. La próxima vez, no me pierdo alguno de sus conciertos.
Oh my. La próxima vez, no me pierdo alguno de sus conciertos.
