Por respeto, excluiremos conductas con cualquier sentido religioso –y porque personalmente practico algunas cosas que a mí me parecen perfectamente razonables pero seguramente no lo sean para cierto sector de la población - y mencionaremos sólo aquellas que fueron chuscas porque para las personas de los relatos sus acciones tenían total sentido aunque nadie más podía verlo así…
5.- Terrorista en el barrio
Frecuentemente me ofrezco para ser el conductor designado porque no suelo tomar mucho por la noche, prefiero manejar yo que confiarle mi vida a un borracho… Esta noche, un amigo se ofreció amablemente a serlo porque estaba tomando medicamentos. Fuimos a una inauguración. Harto chupe lupe y terminé un poco indispuesto. Cuando me tocó el turno de ser botado, de regreso, tuve que caminar una calle. En el camino (330am) ví a un señor que estaba mojando un coche con gasolina!!!!! (según yo) Ahora me da risa pero en ese momento me aterró. Lo pésimo fue mi reacción: mi celular se había quedado no-supe-dónde (coche de mi amigo) y no quería que en casa me vieran llegar tan tomao. Empecé a pensar qué hacer y me quedé dormido!!!. Al otro día salí corriendo a ver qué había pasado. El coche estaba ahí, ni olía a gasolina ni estaba quemado ni nada explotó, sino que estaba perfectamente limpio. Creo que a alguien se le ocurrió que limpiar su coche con un bote de esos amarillos que parecen de gasolina a esas horas sería divertido…. WEIRD!!!
4.- Pásele vecino!
Mi exvecino era muy majo. Su esposa no tanto. Un día él me avisó que saldría de la ciudad por una semana. Yo jamás me acuesto antes de la 1am y en esa semana, escuché voces y risas tontas… me asomé por la ventana y surprise!! La vecina en bata, hablando con otro hombre de lo más divertidos… cuando prendí la luz, ella sacó rápidamente la escoba y se puso a barrer ante la mirada atónita tanto de su acompañante como mía. Barría con una enjundia!!! Jajaja. La noche siguiente volvió a hacer lo mismo, como para disimular. BIZARRO!!!!!!
3.- Lo que hay que oír…
Estos casos no son tan chistosos… el primero, en México. Había plan, al que se pegaron los amigos de los amigos de los amigos. La comida terminó como a las 8pm y la mesa empezaba a reducirse… me acerqué a un grupo de gente que no conocía y escuché que platicaban de que uno de ellos viajaría a Perú al día siguiente porque tenía un contrato para matar a alguien!!!!!…Casi escupo la bebida… Era un tipo de lo más loosersiano capaz de decir cualquier cosa por llamar la atención. El segundo, de cuando vivía en California. Había que hacer este proyecto que era un paper y una demostración de un fenómeno físico o químico. Todo lo que se me ocurría eran reverendas estupideces. Odio esas materias. Le pedí a un chico que fuera mi pareja para el trabajo y al día siguiente se pasó por mi casa. A las 8pm me dijo que se tenía que ir porque tenía que cumplir un pacto con los “espíritus de su casa”! Mi cara de WHAT??? duró como 1 hora. Después me enteré que eso mismo le decía a otras personas, con la variante (no sé si real) de que mataba gallinas para esos espíritus… SPOOKY!!!!!
2.- Es que me da frío en las orejas…
jajajaja. Esto es clásico, y más frecuente de lo que cualquiera imaginaría. Estás en una biblioteca y te encuentras con alguien con audífonos puestos. Te acercas a saludar y preguntas ¿Qué estás escuchando? “Nada, me gusta tener los audífonos puestos”… CREEPY!!!!
1.- Esto es lo más raro que me ha pasado en la vida.
México, DF. Diciembre, 15:00. Fiesta de fin de año de la compañía. Me aterra. Ambiente secretarial 100%, pero tenía que ir porque el jefe reservó dos lugares en su mesa para mi y acompañante. Pero como estas fiestas son all about bailar cumbias hasta que se vaya el grupo y se acaben los CDs, ni siquiera puedes llevar una cita sino debes pensar en una pareja de baile.
Estaban presentes los típicos tópicos… salón entre más cutre mejor, botellas de CocaCola y de Squirt ilimitadas, grupo cuyo repertorio es: A puro dolor, esas horribles de Levantando las manos con movimiento sexy uhhh! y por supuesto el momento cumbre de la tarde es cuando tocan alguna canción de Caballo Dorado. Los jefes jefes se fueron después de comer y de echar uno o dos bailongos con las empleadas más piernonas. Yo me quedé un rato más (grave, grave error) sobretodo porque gente del personal me dijo “órale Lalo, dispárate una botella de tequilitaaa” a lo que no pude decir que no porque en realidad pues si me echan la mano. Y quería tomar un poco de esa botella que yo había comprado. Lo extraño fue esto: había una secretaria (Lupita) que hasta ese día me caía más o menos bien. Era la única de las secretarias que no me hablaba de usted aunque todas las demás tuvieran el doble de edad que yo. Yo creo que le gustaba porque todos los días me llevaba torta y me hacía preguntas muy personales, aunque –casi- nunca me incomodó demasiado. Llevaba a su hija quien como típica puberta de 14 años cayó rendida ante un tío 10 años mayor que ella. Iba al trabajo de su mamá con toda su ilusión para entregarme cartitas y quitarme el tiempo. Suena cruel, pero no le hace bien al ego de nadie tener que romper el corazón de chavitas tan tontas – como ella, donde las haya: más tonta que mis compañeras cuando teníamos su edad, si eso es posible-. En fin, el día de la tortuosa fiesta de fin de año, ella se lució. Estaba ya casi borracha antes de que empezaran a servir las entrées. El grupo musical “amenizaba” el momento en que empezábamos a comer. Ella es la típica que les grita sus sugerencias: “La del guardaespaldas!!!!” (jura que así se llama la canción) “La del Titaniiiiic”, gritaba, mientras comía sus aguacates rellenos de camarones (típica entrada de menú de 80 pesos por persona: I mean, I know they’re suposed to make a proffit but JESUS!!!! Traten de gastar en comida al menos el 25% de lo que cobran!! y claro, los organizadores de la oficina también se podrían esforzar un poquito más.) En fin, la escena era tan pintoresca que lo empezaba a disfrutar. Vino la rifa de botellas (con el típico pleito de siempre porque suelen ganársela los invitados y no el personal) y Lupita se ganó un Ron horrible. Pues ella solita se tomó la mitad de la botella!!!! Me gritó de mesa a mesa toda la tarde. Antes de irme, se le ocurrió volver el estómago, así que me pidió que la acompañara al baño. Me ayudó otro compañero, pero yo la dejé en la puerta del baño y me fui. Aquello ya era terrible: El cuchi-cuchi (chaparrito, idéntico a Pablo Mármol) se quedó dormido en su silla de tan pedo. Su superior todavía estaba ahí. Todo mundo pierde la figura ese día.
El lunes todos comentaban los detalles de la fiesta (suelen terminar bastante mal, la continúan hasta el día siguiente en casa de uno de ellos y nunca me invitan porque es sólo para “personal sindicalizado” jajajjaa. Ni ganas de ir, pero se ponen unas terribles.) Algunos muy divertidos como que descubrí que el que se ofreció a grabar la fiesta y pasar de mesa a mesa a recoger los saludos en realidad era un espía que se encargaba de recoger pruebas audiovisuales de quién pedía doble ración para cobrarle dos servicios. El gordito de contabilidad cayó. Otros terribles, concernientes a Lupita: una amiga me contó que ella estaba diciendo que yo entré con ella al baño y que mientras la ayudaba a volver el estómago, la había manoseado toda. QUÉ????? Se me ocurren 1000 razones por las que eso no era posible:
1.- es una mujer
2.- es un señora
3.- es una señora horrible y chimuela!!
4.- ¿qué haría yo con ella en el baño? ¿ayudarla a volver el estómago? No tiene ningún sentido. Lo peor es que esto hacía perfecta lógica en la retorcida cabeza de la Sra. Lupita
El caso es que me puse de Digna Ochoa con ella y comencé a portarme mamonsísimo. Hasta su hija dejó de ser mi fan y me dio una última cartita donde decía que su mamá le había dicho que yo era un creído y un fresa. Jajaj. El caso es que la oficina estaba dividida entre las secretarias argüenderas (otra joya: sólo podías referirte a ellas como Almita, Clarita, Susanita, Elenita o Carmensita –mi favorito- y no como Alma, Clara, Elena o Carmen, todas ellas encabezadas por Lupita, que dejó de llevarme tortas) y la banda que me creía. Al poco tiempo dejé la empresa. Damn! Justo cuando las cosas se ponían buenas… lamentablemente tuve que rechazar la invitación de la hija para ser su “chambelán”
Sunday, October 23, 2005
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4 comments:
muy buuuen post! jajaja, me hiciste reir...muchos saludos man, seguiré visitándote!
JAJAJAJAJAJAJAJAJA
priceless!
JAJAJAJAJAJAJAJAJAJAJAJAJAJA
Vaya que todos hemos reido y sufrido los bacanales de fin de año con los compañeros de oficina...
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